Sobre esta pieza

Orquestación: 5 flautas (3ª, 4ª y 5ª = flautines; 3ª = flauta baja), 5 oboes (4ª = corno inglés, 5ª = oboe bajo), 5 clarinetes (2ª = clarinete en mi bemol, 4ª = clarinetes en mi bemol y la, 5ª = clarinete contrabajo), 4 fagotes, contrafagot, 8 trompas, 5 trompetas, 3 trombones, 2 tubas, timbales (2), percusión (bombo, crotales, platillos, glockenspiel, gong grande, tambor de troncos, marimba, caja, tam-tam, tambor tenor, yunques afinados, gongs afinados, latas y sartenes afinadas, vibráfono y xilófono), arpa, piano (= celesta) y cuerdas
Primeras actuaciones de la Filarmónica de Los Ángeles

Tevot fue comisionado por la Stiftung Berliner Philharmoniker y la Carnegie Hall Corporation para Simon Rattle y la Filarmónica de Berlín, que dio el estreno mundial en Berlín en febrero de 2007 y el estreno estadounidense en el Carnegie Hall en noviembre de 2007.

"El título de esta sinfonía de un solo movimiento, Tevot (tey-VOT), significa, en hebreo, barras de música", escribe Adès. "También, en la Biblia, (tey-VA) es el arca de Noé, y la cuna en la que el bebé Moisés es llevado en el río."

"Me gustaba la idea de que los compases de la música llevaban las notas como una especie de familia a través de la pieza. Y lo hacen, porque sin los compases, tendrías un caos musical. Pero pensaba en el arca, el recipiente, en la pieza como la tierra. La tierra sería una nave espacial, una nave que nos lleva - ¡y varias otras especies! - a través del caos del espacio con seguridad. Suena un poco colosal, pero es la idea de la nave del mundo", dijo Adès a Tom Service en una entrevista para The Guardian.

"Pensé en la pieza como un gran viaje, pero para que ese viaje fuera verdadero, para darle movimiento, tenía que haber muchos cambios repentinos e instantáneos de paisaje."

"Comienza con figuras altas y espeluznantes en las cuerdas que suenan a la vez ominosas y angelicales", escribió Anthony Tommasini en su reseña del New York Times sobre el estreno en Estados Unidos. "Los gemidos surgen de la orquesta inferior, y la música aumenta en intensidad y complejidad hasta que, en un intento de liberarse, una volea de riffs de 12 toneladas estalla salvajemente, despejando la angustia. La pieza continúa en su episodio más rítmicamente agitado y armónicamente crujiente.

"Entonces comienza un pasaje de música consoladora con suspiros de fragmentos líricos, y estás seguro de que la coda tranquilizadora de la pieza ha llegado. No es así. El Sr. Adès prolonga este episodio durante aproximadamente la mitad de los casi 25 minutos de duración de la obra. Sigue proponiendo nuevas variantes de armonía en capas, sonoridades instrumentales y figuras rítmicas flexibles que te mantienen enganchado".