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Compuesto: 1994

Duración: c. 12 minutos

Sobre esta pieza

Nacido en México, Arturo Márquez pasó sus años de secundaria y preparatoria en La Puente, California, donde comenzó su formación musical. Después de regresar a México, Márquez estudió en el Conservatorio de Música y en el Instituto de Bellas Artes de México, seguido de un estudio privado en París con Jacques Castérède, y luego en el Instituto de Artes de California con Morton Subotnick, Stephen Mosko, Mel Powell y James Newton.

En esa época, Márquez estaba muy interesado en técnicas y procesos vanguardistas, aunque su paso por Cal Arts le dio ideas sobre cómo añadir elementos de jazz y música del mundo a la mezcla. Su first Danzón, compuesto en 1992, muestra cómo se estaba empezando a desarrollar. Era esencialmente una pieza electrónica para cinta y saxofón opcional, pero incluyendo aspectos minimalistas y referencias al danzón tradicional, un viejo baile de salón de Cuba que se hizo muy popular en Veracruz y luego en la Ciudad de México, donde todavía domina.

Esta elaboración inicial sobre el danzón resultó crucial para Márquez, renovando su propio lenguaje musical a un paso de los impulsos modernistas. Su Danzón No. 2, una de las piezas más populares de la música "clásica" del último cuarto de siglo, confirmed esta nueva dirección.

"La idea de escribir el Danzón No. 2 se originó en 1993 durante un viaje a Malinalco con el pintor Andrés Fonseca y la bailarina Irene Martínez, ambos expertos en danzas de salón con una pasión especial por el danzón, que me pudieron transmitir desde el principio, y también durante viajes posteriores a Veracruz y visitas a la Colonia Salón en la Ciudad de México", escribe el compositor. "A partir de estas experiencias, empecé a aprender los ritmos del danzón, su forma, su contorno melódico, y a escuchar las viejas grabaciones de Acerina y su Orquesta de Danzonera.

Me fascinó y empecé a comprender que la aparente ligereza del danzón es sólo como una tarjeta de visita para un tipo de música llena de sensualidad y seriedad cualitativa, un género que los ancianos mexicanos siguen bailando con un toque de nostalgia y una fuga jubilosa hacia su propio mundo emocional; afortunadamente todavía podemos verlo en el abrazo entre la música y la danza que se da en el Estado de Veracruz y en los salones de baile de la Ciudad de México".

-John Henken