Acerca de este artista

Quizá el compositor con la historia personal más trágica de su generación sea Silvestre Revueltas, cuyo genio creativo desbordado se alimentaba de copiosas cantidades de alcohol en una lucha por vivir una vida de extremos. Fue un niño prodigio en su México natal y se trasladó muy joven a Chicago, donde estudió composición y violín. En 1929, Carlos Chávez, que reconoció el gran talento de Revueltas, le invitó a ser el asistente director de orquesta de la recién formada Orquesta Sinfónica de México y a enseñar composición en el Conservatorio de México. En 1937, Revueltas viajó a Europa para dirigir su música, y se implicó en la lucha socialista contra los fascistas durante la Guerra Civil española. A pesar de que la mala salud, la pobreza, el exceso de trabajo y el alcoholismo se cebaron con él a una edad temprana, los últimos diez años resultaron extraordinariamente productivos, y compuso más de 30 piezas durante la década de 1930.